La personalidad no es inamovible, a pesar de que venga determinada en muchos casos por la herencia, pero también es cierto que es el resultado de las miles de interacciones con el ambiente y contexto que nos rodea, en resumen la existencia. A pesar de las personas reticentes que ofrecen resistencia al cambio es posible cambiar el comportamiento y para ello se desarrollan terapias y formas de hacerlo que ayudan en forma importante a que se desarrolle constancia y motivación en el proceso del cambio.